“¿Quieres ser feliz? Despréndete de tantas cosas que no necesitas.”
David Noel Ramírez
Hace unos días, tuve la oportunidad de asistir a un desayuno-conferencia organizado por Familia Unida, sobre el cómo vivir la Navidad a plenitud, la cual fue impartida por David Noel Ramírez Padilla, rector del Tec de Monterrey.
David Noel, cómo muchos le conocemos, es un ser tan humano y asertivo, que además de vivir entregado a la familia ITESM, se desvive por los jóvenes, la Iglesia y la filantropía. Y entre tantas cosas que aprenderle, me fascinaron sus consejos prácticos y humanos, para irnos preparando para la Navidad. Sería bueno regalarnos un tiempo para examinar nuestras disposiciones interiores y reconocer de qué cosas hay que despojarnos.
Y es que solamente llega la época navideña y solemos preocuparnos por nuestro camarote, pero descuidamos el barco. Nos preocupamos por los regalos y nos ocupamos en lo de afuera, pero dejamos de mirar lo importante. Nos acomodamos en la indiferencia y en el individualismo y dejamos de mirar las necesidades de los demás.
¿Cómo entendemos la Navidad según David Noel?
- Renunciando a la indiferencia. Buscando estar atentos a las necesidades de los que nos rodean, examinando cómo tratamos a las personas que trabajan con nosotros. Desprendiéndonos de nuestro egoísmo y de las cosas que nos atan para recibir a Jesús.
No teniendo miedo de ir contra corriente y comprendiendo que la barranca que nos hunde es el hedonismo, el individualismo y el egoísmo.
- Liberarnos de lo que nos ata y nos impide ser felices. Subir al Belén y no dejarnos llevar por lo material.
Aprendamos a sacrificarnos porque en los momentos difíciles es importante no tomar decisiones egoístas.
Liberémonos lo que tenemos en exceso, compartamos, demos.
Identifiquemos que cosa nos hace sentir lejos de Dios.
- La felicidad y Dios se encuentran en lo sencillo y en lo humilde.
¿Quieres ser feliz? Despréndete de tantas cosas que no necesitas.
Las personas más felices son las que no necesitan. Acostumbrémonos a vivir con lo necesario. Entre más cosas tenemos, más nos preocupamos.
Jesús nace en lo necesario, aprendamos a desapegarnos de las cosas.
- No tener miedo. Reafirmemos nuestra confianza en Dios.
Busquemos llenarnos de Dios para salir y darlo al mundo.
Buscar transformar nuestras familias es transformar nuestro entorno.
Asegurarnos que nuestros hijos hagan, conozcan y vean el bien, con la mirada siempre de que no se puede amar lo que no se conoce.
- Anunciemos con obras. Busquemos la paz, pero comenzando a vivirla en nuestra familia. La solución ante todo problema está en fortalecer la familia. Se pierde la familia y se pierde toda la formación. Nos van a evaluar en el DAR, así que enfoquémonos en las obras de misericordia.
¿Quieres ser feliz? Despréndete del exceso, comparte, ten obras buenas con los demás. Ahí es donde se experimenta a Dios y donde se experimenta la verdadera paz y felicidad del corazón. Y eso es navidad, eso es la verdadera navidad. Así que preparémonos: soltemos, regalemos, demos, sonriamos, abracemos… y esa es la Navidad que vivirá en nuestro corazón.