Llegó diciembre y con él un sinfín de sentimientos, nostalgia, encuentros y reencuentros.
Un mes en el que se siente frío por fuera, pero muy cálido por dentro.
Nuestro último mes del año, con sus 31 días, dispuesto a ser disfrutado como se merece.
Uno de los favoritos de muchos, por su magia, por la facilidad de ablandar corazones, de hacer reuniones y recapitular cada una de las experiencias vividas en el año.
Llegó diciembre y con él la oportunidad de abrazarnos con nuestros seres queridos, reunirnos sin prisas con la familia y los amigos, haciendo sobremesa e iniciando conversaciones más profundas.
Un mes donde el amor, el cariño y el agradecimiento se presentan de muchas formas: en regalos, en detalles, en palabras y acciones.
Un mes donde los villancicos navideños son los protagonistas de la temporada, pues el espíritu de la Navidad llega a todas partes: a las calles, las casas y los corazones de los creyentes.
Con la oportunidad de desear, de creer que todo se puede hacer realidad, de pedir y agradecer.
Así que deseo que este mes encuentres la tranquilidad y paz que tanto necesitas.
Que puedas detenerte y observar a tu alrededor, valorar lo que posees, aquello por lo que has trabajado y soñado: tu familia, tu profesión, tu hogar, tu persona.
Que reconozcas cada uno de tus logros, aplaudas tus metas y no te culpes por lo pospuesto, por los errores o lo que ni siquiera intentaste.
Que conectes contigo mismo y con aquellos que compartes tu vida, que se sienta la empatía, el respeto, el agradecimiento y el amor.
Que puedas ayudar a quien lo necesita, que seas ese rayito de luz y esperanza para los que la estén pasando mal. Que seas el sostén de aquel que está por quebrarse y de quien necesita un hombro para recargarse y llorar.
Deseo que puedas sentirte libre, seguro y orgulloso de quien eres, de lo que estás haciendo y lo que estás creando.
Que el dolor, las preocupaciones y las enfermedades no se apoderen de tus pensamientos, ni te impidan sentir la felicidad que mereces.
Que el resentimiento, la culpa y el enojo se desvanezcan con el perdón y te sientas en total armonía.
Deseo que diciembre te regale sonrisas, bienestar, dicha, gozo y sean unos días de reflexión, disfrute, prosperidad y alegría.
Te deseo todo lo bonito en diciembre y para siempre.
