Por: Humberto Casas
Ivanova Rosales García caminó al altar del templo de Santiago Apóstol del brazo de su padre Jorge Rosales Saade. Ahí dentro la esperaba Sergio Villarreal Guerra, acompañado de sus padres Alberto Villarreal Flores y Martha Guerra Dávila, junto a la madre de Ivanova, Nora García Astiazarán.
Una ves iniciada la misa y declarándose el mas profundo amor, el padre Juan Ruiz fue el encargado de dar el mensaje que dios tiene preparado para el joven matrimonio quienes se juraron fidelidad y compromiso con los anillos que les dieron sus padrinos Nora Rosales García y Arturo González Monárres. Luego se entregaron uno al otro las arras para prometer el cuidado de sus bienes, recibidas de manos de Alejandra González Moreno y Alberto Villarreal Guerra. La pareja alumbró su camino con dios con el apoyo de Mario Villarreal y Marcela Ramos; Manuel Rosales e Itzayana Montesinos, padrinos de velación.
Luego de esto, Ivanova y Sergio quedaron unidos para siempre con el lazo que les colocaron sus padres, momento emotivo que compartieron como muestra de la unión de las dos familias. Al termino de la misa el nuevo matrimonio salió triunfante del templo para dirigirse a su recepción.
Ahí hicieron su entrada triunfal luego de la música del mariachi, bailaron cada uno con sus padres y pasaron al momento principal de la noche, el conocido primer vals como marido y mujer, que culminó en un gran beso entre miles de papelitos blancos que volaron a su alrededor. La sorpresa de la noche fue que después de esto, los fuegos artificiales iluminaron el cielo y los invitados así como la pareja disfrutaron del momento, guardándolo en sus mentes para siempre.
