LA INSATISFACCIÓN CRÓNICA | Saltillo360

LA INSATISFACCIÓN CRÓNICA

MARIANA CABELLO

La insatisfacción crónica es un síndrome que acecha a muchas personas de la sociedad actual, son seres humanos que viven en condiciones óptimas en todos los aspectos de su vida; sin embargo, no sienten felicidad y plenitud por el presente y los logros obtenidos.

Es una incapacidad para disfrutar de sí mismos y de las personas que los rodean, junto con la culpabilidad de tenerlo todo y no saberlo gozar. Es un descontento por la vida diaria, aun sabiendo lo afortunados que son. Un sentimiento de tristeza y nostalgia permanente les invade y no les permite ver lo que sí tienen y pensar en positivo.

La comparación con los demás y el camino recorrido del otro es algo sumamente estresante para los que padecen de esto, pues sienten que la vida se les está yendo de las manos.

La insatisfacción crónica es tóxica y conduce al perfeccionismo y a la exigencia en su máxima potencia, que deriva en estrés, egoísmo, envidia y depresión.

La queja y los lamentos son los ingredientes que más refuerzan el mal, agravan la insatisfacción y, por ende, la desesperanza.

Existen dos formas respecto a cómo gestionar esta sensación y recuperar la alegría y vitalidad de lo que ofrece la vida.

La primera es tener una perspectiva en donde se trabaje con la sana aceptación de que las cosas son tal cual son, valorarlas y agradecer. La insatisfacción quedará reducida a una cuestión de actitud y de aprender a ser felices de muchas formas y en cada circunstancia.

La segunda es ver con enfoque de análisis aquellos aspectos que incomodan, que disgustan y buscar el cambio. Poner objetivos claros y concisos junto con una promesa para conseguirlos.

La solución para combatir este mal depende de la capacidad de combinar estas dos estrategias, ver de manera realista y con total honestidad y franqueza la propia vida, aceptar tal cual es el presente que no se puede modificar y trabajar activamente y de forma efectiva y realista en lo que sí tiene una solución y cambio.

Aceptarse, moverse, desechar pensamientos negativos, no hacer caso a las expectativas de los demás, ocuparse de la propia vida, buscar la excelencia mas no la perfección, arriesgar y salir de la zona de confort, disfrutar del camino y no solo pensar en la meta son pequeñas acciones que se pueden poner también en práctica.

Además de acudir siempre con un especialista y no privarnos de lo maravilloso que es vivir

Mariana Cabello

Mujer apasionada por encontrar un propósito en la vida. Licenciada en Ciencias de la Comunicación. Enamorada de las letras y del sentimiento que provoca el transmitir ideas, expresiones y conocimientos.